AUTOR DEL BLOG

Mi foto
Nací en Palencia en 1960. Ejerzo la docencia en un Instituto de Elche como profesor de Historia del Arte e Historia Contemporánea. He escrito algunos libros y me gusta leer. Participo en diversas actividades literarias. No soy un crítico: lo que pongo aquí son algunas impresiones muy breves sobre lo que leo. No pretendo más. Gracias por visitarme.

viernes, 20 de febrero de 2015

NOTRE DAME DE PARIS, Víctor Hugo

   Acabo de terminar la gran obra de Víctor Hugo. Necesito varios días para recuperarme. Es una novela romántica, escrita en 1830, pero ambientada en 1482. Se enmarca en la historia, pero el autor hace gala de una profusa imaginación, y de frecuentes situaciones límite, muy del agrado de los románticos del siglo XIX. 
   Necesito recuperarme, decía, porque es una novela muy dura, con un final trágico y nada complaciente, en el que Víctor Hugo se recrea. No nos ahorra ninguno detalle de la catarsis final. La novela comienza con un cierto caos, aparente, en el que van apareciendo los personajes. Al principio, describe el ambiente de París en aquella época, un ambiente recreado, imbuido de romanticismo y fatalismo. Poco a poco, las piezas van encajando magistralmente, hasta su aciago colofón. De hecho, si uno comienza a leer en la página 200, tampoco se pierde mucho de la trama, pero no habrá apreciado la ambientación ni el carácter de los personajes. 
    Quasimodo, el jorobado de Notre Dame, ha pasado a ser uno de los iconos más conocidos de la literatura universal. En la novela inspira una gran compasión. La única persona que tiene con él un detalle de ternura es la gitana Esmeralda, y eso hace brotar en Quasimodo el corazón que llevada enterrado bajo su deformidad. El eterno mito de la bella y la bestia recreado con la emoción de un maestro. Pero Hugo estira tanto las situaciones, las miserias humanas y las pasiones, que a veces rozan en la caricatura.

viernes, 13 de febrero de 2015

MAYERLING, Terence Young, Omar Sharif

   
  Interesante película histórica rodada en 1968, con excelente reparto Trata de Rodolfo, príncipe heredero de Austria, y su amor extra matrimonial con una joven aristócrata. 
   También trata de sus pretendidas simpatías por los liberales y socialistas, de su apoyo a la rebelión húngara, y de la rebeldía contra su padre, el gran emperador del Imperio Austro Húngaro Francisco José, marido de la famosa emperatriz Elisabeth, la famosa Sissí. 
   La película está basada en hechos reales, ya que Rodolfo fue, en efecto, rebelde y murió de manera trágica. Cuando estuve en la cripta de los capuchinos, en Viena, pude visitar los sepulcros de todos estos personajes. En verdad, la vida del emperador Francisco José fue bastante trágica. Fue emperador de 1849 a 1916. Su mujer Sissí fue asesinada, se cree por equivocación, en Ginebra en 1897; su hijo Rodolfo y único heredero, en efecto, se suicidó; uno de sus hermanos, Maximiliano, ocupó el trono de México, pero fue derrocado por Benito Juárez y fusilado; su sobrino, que iba a ser el heredero del Imperio, murió asesinado junto a su esposa en 1914, en Sarajevo, hecho que dio inicio a la primera guerra mundial. 
   Francisco José murió sin ver perdida esta guerra ni desintegrado su Imperio. Eso le correspondió a su heredero, otro sobrino llamado Carlos de Habsburgo, casado con la noble portuguesa Zita. Carlos tuvo que huir y ver cómo desparecía el Imperio. Fue una persona ejemplar, que se preocupó de sus súbditos, en especial por los más necesitados, tuvo una vida familiar ejemplar, y una vida cristiana realmente auténtica. Tanto es así que la iglesia le ha elevado a los altares. Zita está enterrada en la cripta de los capuchinos, pero Carlos está enterrado en Madeira, ya que los lugareños le tienen gran devoción y no permitieron que se lo llevaran. 
   En cuanto a la película, está bien aunque se detiene más en los amores de Rodolfo que en la situación histórica de entonces. No es para poner la clase, ya que es un poco lenta y no resulta atractiva para adolescentes.