Esta novela publicada recientemente ha sido el gran acontecimiento editorial del año. Es la primera novela de su autora, María Dueñas, una profesora de Filología de la Universidad de Murcia. María Dueñas tiene ahora mismo una dificultad: su primera obra es tan buena que, aunque ya le están lloviendo los encargos, es difícil que la supere. Le puede ocurrir como a tantos, desde Susana Tamaro hasta Luis Landero. Esperemos que no sea así.
En efecto, “El tiempo entre costuras” en una novela magistral.
En mi opinión, tres son los aspectos que debe abarcar una novela para ser buena:
• Un argumento: una trama que te atrape, que no permita altibajos, que tire del hilo de tu interés hasta que termines hecho un ovillo.
• Un estilo personal de escribir, cuidado, pulido, que ponga en cada caso la palabra que defina, abarque el concepto que se quiere transmitir, o la situación física o anímica de los personajes.
• Un contexto: Un mapa existencial, geográfico, ideológico o histórico de fondo, que otorgue relieve a lo que se cuenta y que ancle el argumento en una etapa y en unos lugares y en unos sentimientos reales y creíbles, de tal manera, que además de entretenerte, hayas aprendido de historia, de lugares, de mentalidades… y de la misma existencia humana con sus complicadas relaciones.
Pues bien: esos tres elementos, en mi opinión, se dan de una manera soberbia en esta obra.
La trama te atrapa desde la primera línea: no hay precipitación pero tampoco lugar para el reposo. Sin ser una obra policiaca, abundan situaciones límite y llenas de emoción. Es un drama, una obra plenamente humana con personajes normales, como nosotros, a los que la vida trastea de un modo feroz.
El estilo es pulido, directo. No dice una palabra de más ni de menos. Con poco cuenta mucho. Se hace con las situaciones de una manera tan natural y diáfana, que te lleva en volandas casi sin esfuerzo. En pocas palabras: está fenomenalmente bien escrita.
Y, en último lugar, el contexto: la época, desde los años 20 pasando por la guerra civil, que está ambientada en su punto y sin maniqueísmos. Al terminar sus páginas, entiendes más sobre lo que ocurrió en la España y en la Europa de aquellos azarosos años.
¿Sombras? Para alguno puede parecer un relato demasiado femenino, que se detiene en detalles livianos, como todo lo que a la moda se refiere. Para otros, algunos de los juicios políticos que vierte pueden ser más que matizables. Y para los impacientes, quizá les sobre algunas cuantas páginas.
Con todo, es una de las mejores novelas que leído últimamente. He disfrutado de veras. La recomiendo.